Molino del año 1253, al lado del río Tenes, en él se molían legumbres y cereales. Funcionaba con agua, hasta después de la guerra civil, que paso a ser eléctrico. Aunque generaciones de familias han vivido en él, el último molinero fue Amador Relats, más tarde, parte de la finca se utilizó para la extracción de áridos, en la actualidad abandonado, aunque podemos encontrar inquilinos de cuatro patas.